30 octubre, 2010

PAVIMENTACIÓN PLAZA SAN FRANCISCO JAVIER

El pasado 4 de agosto, a petición del los concejales del Grupo Municipal Socialista, se celebró un pleno extraordinario para pedir explicaciones al equipo de gobierno sobre posibles irregularidades, cometidas en la adjudicación de dos obras: la pavimentación de la plaza San Francisco Javier, y la tercera adjudicación de las obras de renovación de redes y pavimentación. Empezaremos por la primera, la plaza San Francisco Javier.

Como conclusión: la alcaldía de Ribaforada, al no solicitar al menos tres ofertas como obliga la normativa foral, impidió que otras empresas optaran a realizar la obra y concedió ventaja al adjudicatario de la misma, afectando esta falta de concurrencia negativamente a las arcas municipales, al no poder comparar con otras ofertas que hubieran podido ser más ventajosas.

La obra de pavimentación de la plaza estaba incluida dentro de las obras de renovación de redes y pavimentación, pero, el equipo de gobierno, a través de la comisión de urbanismo, decidió cambiar la pavimentación elegida inicialmente, por otra más “acorde” al entorno (Ayuntamiento, Casa de Cultura y Centro de Día). Se decidió, una pavimentación con adoquines, en lugar de un aglomerado asfáltico. Hasta aquí, todo correcto. Se trata de una mejora dentro de una obra, y como toda obra, debería adjudicarse de forma correcta.

Se adjudican las obras por el procedimiento negociado sin publicidad comunitaria. El procedimiento negociado es un procedimiento de adjudicación no formalizado, en el que la Administración consulta y negocia las condiciones del contrato con uno o varios empresarios de su elección y selecciona la oferta justificadamente. En este caso concreto, es obligatorio negociar el procedimiento con tres empresas.

Las obras se adjudicaron por un importe de 60.800 euros. Nuestro grupo preguntó por la adjudicación de estas obras el pasado 23 de septiembre de 2009, respondiendo la Alcaldesa, que se realizó la adjudicación “sin tener tiempo material de poder consultar oficialmente y negociar el contrato con tres empresas”. Sin embargo esta excusa no impide el cumplimiento de la ley por dos razones.

La primera es que la Memoria de pavimentación de la Plaza San Francisco Javier fue aprobada por resolución de alcaldía 18 de marzo de 2009 y la adjudicación de la obra se realizó por resolución de alcaldía de 16 de julio de 2009, cuatro meses más tarde, tiempo más que suficiente para haber invitado a otras dos empresas. ¿Por qué no se hizo? ¿Por desidia, por pereza, por holgazanería, por desconocimiento, o por interés?

Y por otra parte, hay una segundna razón, ésta de carácter legal. La Ley Foral de Contratos Públicos establece que “Las invitaciones a negociar deberán enviarse simultáneamente y por escrito, señalando la fecha límite de presentación de propuestas, las necesidades que busca cubrir la Administración así como los términos de la negociación”. Por cierto, la única empresa a la que se invitó, envió su oferta con fecha 6 de abril de 2009, por lo que las otras dos a las que no se invitó también podían haber enviado su oferta en la misma fecha y todavía habría dispuesto la alcaldía de tres meses para adjudicar la obra al mejor postor.

Por tanto la adjudicación de las obras de pavimentación es un acto administrativo que incumplió la norma foral de contratos públicos.

En resumen, al incumplir la norma de contratación foral, la Alcaldesa impidió que otras empresas optaran a realizar la obra y concedió ventaja al adjudicatario de la misma. La falta de concurrencia afecto negativamente a las arcas municipales al no poder comparar con otras ofertas que hubieran podido ser más ventajosas para el Ayuntamiento y para los vecinos. Nuevamente, asistimos a una mala gestión del equipo de gobierno.

En el pleno extraordinario del pasado 4 de agosto, la Alcaldesa siguió negando los hechos, y defendiendo que se había actuado así por el interés. ¿Por el interés de quién?

14 octubre, 2010

PLENO EXTRAORDINARIO Y URGENTE DEL 07/10/10

El pasado jueves 7 de octubre, la Alcaldesa convocó un pleno extraordinario y urgente para apoyar a los cargos públicos y el personal municipal.
La propuesta de Alcaldía era la siguiente:

1º.- Ofrecer el apoyo al Teniente de Alcalde, D. Javier Carcavilla, ante la presunta agresión sufrida el pasado sábado, 2 de octubre, en el ejercicio de sus funciones.

2º.- Dejar constancia de que el Pleno del Ayuntamiento no tolerará ninguna amenaza, coacción o agresión, bajo ningún concepto, a los cargos públicos y/o personal municipal, en el desempeño de su actividad.

3º.- En caso de que estos hechos se produzcan, el Ayuntamiento actuará, de oficio, ante las instancias judiciales correspondientes.

Por su parte, el Grupo Municipal Socialista, presento la siguiente propuesta de apoyo:

- El Pleno del Ayuntamiento de Ribaforada expresa su rechazo a cualquier tipo de violencia, bien sea de tipo físico o verbal, así como coacciones, amenazas o insultos, que puedan sufrir tanto los cargos públicos como el personal municipal. Asimismo, insta a todos sus miembros a resolver los problemas por la vía del diálogo, en base a las herramientas contenidas dentro de nuestro estado de derecho (leyes, normativas, ordenanzas, legislación, etc.), manteniendo un comportamiento cívico correcto.

Sometida en primer lugar a votación la propuesta de Alcaldía, el Grupo Municipal Socialista, a excepción de uno de sus miembros, nos abstuvimos en el primero de los puntos al entender que los concejales no estamos para emitir juicios sobre “presuntas agresiones”, sino que serán los jueces los que determinen lo sucedido, y aplicaran las penas o castigos requeridos. Los hechos han sido denunciados, para ello, se cuenta con todos los recursos y herramientas del ayuntamiento, como ha sucedido en ocasiones anteriores.

El segundo y el tercer punto, fueron votados por unanimidad. Nuestra propuesta de rechazo a la violencia, también fue votada por unanimidad por todo el pleno del ayuntamiento.

Si lo que se pretendía era un único acuerdo que fuese votado por unanimidad, ¿no habría sido mejor haber mantenido antes una reunión para llegar a un consenso en el texto a presentar al pleno, en lugar de tratar de imponernos un texto?. Es más, ¿no habría sido mejor que el propio concejal afectado por este tema, nos hubiera informado de lo sucedido?. O incluso, ¿no habría sido mejor informar a la comisión de los pasos que se iban a dar con el tema de la resolución judicial?

Desde aquí, nuevamente, queremos dejar constancia de nuestro total rechazo a cualquier tipo de violencia, tanto física como verbal, tal y como se recoge en nuestra propuesta de apoyo. Los problemas deben resolverse por la vía del diálogo, y si no es posible, recurriendo a las herramientas de nuestro estado de derecho, no estando contemplada en ningún momento la violencia. Y hacer extensible este apoyo al personal municipal que en ocasiones también han resultados amenazados o insultados por algunos vecinos, y para los que el ayuntamiento entonces no ha mostrado la misma sensibilidad que ahora.